jueves, 11 de septiembre de 2014

La prevención, la mejor aliada contra las arrugas

prevenir las arrugas



La prevención, en la mayoría de los aspectos de la vida, es la mejor de las estrategias, y esta máxima puede aplicarse sin duda al cuidado de nuestra piel, para conseguir que siempre luzca bella y radiante. De hecho, las arrugas que empiezan a mostrarse en el rostro, producto del paso de los años y la inevitable pérdida de capacidad del organismo para producir los elementos naturales que permiten que la piel se mantenga elástica (colágeno y ácido hialurónico) pueden atacarse tempranamente, antes que se vuelvan más profundas y controlarlas.

Estas arrugas superficiales se sitúan en la primera capa de la piel, la epidermis, por lo que aún no ha profundizado hacia la capa posterior, la dermis y, en consecuencia, todavía no se ha creado el surco o marca de expresión, el cual requiere de tratamientos más complejos y específicos para su eliminación. Estos primeros signos del envejecimiento de la piel, si se tratan a tiempo, pueden ser eliminados totalmente. Pero es importante que tomes cartas en el asunto en el mismo momento en que empieces a detectar esas arruguitas superficiales.

La hidratación es fundamental


Mantener una buena hidratación de la piel resulta fundamental. Si observas tu rostro frente a un espejo por las mañanas y por las noches, notarás que tras una jornada intensiva, cargada de estrés, preocupaciones y tareas, se habrán formado algunas arrugas superficiales. Éste tipo de arrugas son producto de la deshidratación de la piel, y se eliminan con un buen descanso. Aquí tienes el primer consejo útil: procura descansar adecuadamente, entre 7 y 8 horas de sueño cada día. La falta de sueño reparador es uno de los peores enemigos para la piel. El sueño, si es adecuado, permite recargar de energía el cuerpo, lo que se nota en nuestra piel. No en vano cuando duermes mal durante varios días consecutivos, verás tu piel más seca, gastada y sin luz.

El segundo consejo relacionado es mantener un óptimo nivel de hidratación de tu piel: beber mucha agua, incluso sin sed, es un gran aliado del cutis. Procura beber al menos dos litros de agua cada día. Del mismo modo, ayúdate de una buena crema o serum hidratante para recuperar el líquido perdido por tu piel, aplicándola cada mañana al despertar y por la noche antes de acostarte. Verás como en poco tiempo esas arrugas por falta de hidratación se difuminan y desaparecen. Aplicar una buena mascarilla hidratante al menos una vez por semana es también un gran preventivo.

Así que ya sabes, la correcta hidratación de tu piel debe ocupar un lugar destacado en tus prácticas de belleza, así prevendrás y evitarás la formación de arrugas.

Las líneas de expresión


Si te ríes a menudo o gesticulas mucho cuando hablas, probablemente verás cómo esas líneas del contorno de las zonas como el entrecejo o el contorno de la boca se van acentuando con el paso del tiempo. No debes cambiar tu personalidad por ello ni dejar de comportarte como sueles hacerlo, de hecho en muchos casos son gestos involuntarios que realizamos de manera inconsciente y que forman parte de nuestra forma de ser y actuar. Y por supuesto ¡no dejes de reír¡

Es inevitable que con el paso de los años, estas líneas de expresión se hagan permanentes, es algo que no se puede evitar. Pero ya que lo sabes, intenta seguir los consejos básicos para que tu piel se mantenga elástica y así minimizarás este efecto.

Cuando la arruga superficial pasa a ser profunda, formando un surco, es porque la pérdida de elasticidad alcanza el tejido de la dermis, atravesando todo el espacio de la epidermis. En este caso, el procedimiento para atenuarla o reducirla pasa por la utilización de productos cosméticos específicos o tratamientos estéticos como el laser, las inyecciones de colágeno o ácido hialurónico y los tratamientos a base de botox.

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